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Fueron meses de arduo entrenamiento, de cuerpos agotados que se alzaban una y otra vez para esculpir en movimiento la fuerza de cada verso.

Producir y montar AMARTE ha sido un viaje intenso y profundo, donde el amor se despojó de su velo romántico para revelarse en sus matices más crudos y desgarradores. Fueron meses de arduo entrenamiento, de cuerpos agotados que se alzaban una y otra vez para esculpir en movimiento la fuerza de cada verso. En la casa de Raquel Cervantes, nuestra directora ejecutiva, nació la esencia de esta obra, entre discusiones apasionadas y bocetos trazados en el aire. Allí, con Julie de Donado, Yesit Cardona, Ivette Galofre, Tania Iglesias y Yany Manotas, tejimos los hilos de una narrativa danzada, transformando poesía en latidos, respiraciones en silencios y coreografías en cicatrices abiertas al público.

El escenario no solo albergó a los bailarines, sino también a un equipo técnico incansable, que con luces y sombras dio profundidad a cada emoción. AMARTE fue más que un montaje; fue una entrega absoluta de cada alma involucrada, un acto de fe en el arte como espejo de lo humano. Entre el sudor de los ensayos y el vértigo de la creación, construimos un universo donde el amor no es solo ternura, sino también ausencia, despedida y renacer. Y en cada paso, en cada suspiro, dejamos una parte de nosotros, sabiendo que al final del telón, algo en quienes nos vieron danzar jamás volverá a ser igual.

Y Tü disfrutaste AMARTE? cuales fueron tus impresiones?? compártenos tus sensaciones!!

fundacionsauter@hotmail.com

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